‘Vamos a quererte hasta que aprendas a quererte’
El pastoralismo, según Foucault, tiene su origen en la práctica cristiana del poder pastoral, inspirada en la figura del pastor que cuida a su rebaño. Es un tipo de poder muy convincente porque es individualizante (como un pastor que vela por el bienestar de cada oveja), es totalizante (aunque se presenta como preocupado por el individuo, su propósito final es el bienestar del “rebaño”, lo que introduce una paradoja: el cuidado de cada uno en función del todo), es espiritual (a diferencia del poder represivo, el poder pastoral no solo disciplina, sino que también guía las almas y moldea conciencias) y, finalmente es omnipresente (no se ejerce desde la distancia sino desde la proximidad, operando sobre los afectos y la vida íntima de los sujetos). Su objetivo no es solo la obediencia, sino también la redención en terminos de bienestar y felicidad: ‘Vamos a quererte hasta que aprendas a quererte’, dicen en Alcoholicos Anónimos.
El pastoralismo, según Foucault, tiene su origen en la práctica cristiana. Su objetivo no es solo la obediencia, sino también la redención: ‘Vamos a quererte hasta que aprendas a quererte’, dicen en Alcoholicos Anónimos.
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Hace años, mi entonces ‘sponsor’ en Narcoticos Anonimos en Inglaterra (hoy terapeuta que es algo equivalente a ser psicólogo en la Argentina) me dijo: ‘Yo te quiero incondicionalmente’. Inmediatamente le dije: ‘No, vos me querés incondicionalmente porque te hace quererte a vos. Yo no importo en ese esquema’. En la Argentina, mi experiencia de Narcoticos Anónimos fue casi surrealista. Mi sponsor tras dos conversaciones me recomendó quedarme en la Argentina (lo que implicaba decisiones de las que no hay vuelta atrás en terminos de visado y salud para un seropositivo como yo; si se tiene en cuenta la discontinuidad en la provision de medicamentos que tiene lugar hoy por esos lares). Diez dias despues me pidió plata. Mientras daba cátedra, en su cabeza, de cómo vivir una vida moralmente superior.
Mi sponsor de los 12 Pasos en Argntina me pidió plata prestada, mientras daba cátedra, en su cabeza, de cómo vivir una vida moralmente superior.
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Narcóticos Anónimos: Víctimas automáticamente transformadas en Pontífices
Creo que usé Narcoticos Anónimos no para no tomar drogas porque, la verdad del asunto es que nunca tuve un problema real con ellas sino que eran una forma de automedicacion de una enfermedad mental no diagnosticada por esa industria feroz que es la psiquiatria y de darme un recreo de lo incorporados de los mandatos maternos y ni hablar, en la Argentina, de las supuestas obligaciones que uno tiene ‘como hijo’ o ‘como ciudadano’. Ni hablar de la paradoja que plantea la sexualidad para un Argentino de mi generacion que pasa de la persecusion en la Dictadura a la alegria total y la aceptacion irrestricta que a uno lo obliga a ser feliz en el Kirchnerismo y de ahí a ser acusado de pedofilo por Milei en Davos. Esto no lo digo como victima sino que son las condiciones de existencia especificas de ser gay argentino. La alternativa a esto por supuesto es el pastoralismo: volverse Novaresio y transformarse en una copia de una copia que es Feinman o Laje.

Novaresio: El Gay Pastoral Hipócrita
El tema de la sexualidad contemporánea tienen un carácter eminentemente pastoral, ya que se presentan bajo el discurso del cuidado, la protección o la defensa de la dignidad, pero terminan funcionando como dispositivos de control. El deseo es domesticado. Lo que originalmente era disidente y desestabilizador es absorbido por un discurso de cuidado e inclusión. Nunca voy a olvidar cuando la hija de un coleccionista importante brasileño me dijo en su casamiento en Rio: ‘No te preocupes, vos tambien vas a llegar a ser feliz’. El Pride y la marcha del otro día contra la imbecilidad de closet de Milei, salieron a defender el derecho a dar cuidado y protección a individuos como yo pero a cambio pide regularlas; confinándolas a marcos de respetabilidad social que varian hacia la derecha tal es el caso de Novaresio.
Liliana Viola, Malena Pichot y el HIV como insulto


Desde la progresia que es lo más reaccionario de la Argentina tenemos a una hija de puta como Liliana Viola que, durante mi cancelación, pretendió, por el solo hecho de ser un significante flotante imposible de controlar; quitarme los rasgos (aunque fluidos) de identidad que decidi poner en juego para defenderme del avance de un feminismo patriarcal como pocos como fue esa uterofilia violenta del Ni Una Menos. Fijense que me llama ‘sidoso’; algo que usa como si fuera usable. Ahí no hay pastoralismo que valga sino respeto y esa señora (o aborto de alguna señora) no sabe lo que es el respeto.
Malena Pichot: La Hija de Pxta Elevada en Apoteosis por el Kirchnerismo




El problema del pastoralismo es que domestica la sexualidad y la separa de su potencial disidente. En este sentido, la sexualidad queer se despolitiza, reduciéndose a un asunto de identidad individual o de derechos formales, en lugar de mantenerse como un espacio de disenso o de resistencia radical. En el caso del kirchnerismo, como bien lo indica Viola con su insulto, uno era un queer productivo, siempre y cuando, fuera retorica y visualmente marginal y delegara en ella, la verdadera representacion.
Ginette Reynal y la Pelotuda Comerciante de la Victimología
Todo lo antedicho se vincula con AA y NA de dos maneras. La primera es que la logica imperante es religiosa y heterosexista por lo que se permite, como me paso en una sesion en Parque Las Heras que un imbecil usaba su minuto de ‘compartir’ para decir cosas como que ‘el no soportaba a los gays’ o que si ‘su hijo era gay, el lo cagaba a trompadas’. Lo agarré afuera de la reunión y le dije: ‘Volvés a compartir tu honestidad terapeutica y te rompo la cara’. Obviamente, eso fue suficiente para ser odiado por todos los amantes del amor y el cuidado mutuo.
En una sesion de los 12 Pasos en Parque Las Heras, un imbécil dijo que ‘el no soportaba a los gays’ o que si ‘su hijo era gay, el lo cagaba a trompadas’. Le dije: ‘Volvés a ser honesto y te rompo la cara’. Fui odiado por los amantes del amor.
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La segunda bajo la apariencia de cuidado, genera un poder más penetrante que el poder de la dictadura que seguimos iconizando desde la derecho o desde la izquierda: no reprime abiertamente, sino que regula desde el afecto, el bienestar y la protección. Yo la escuché decir a Ginette Reynal desde su altura fisica y supuestamente social, con tono de condescendencia: ‘El problema es que vos todavia estás atrapada en tus propios demonios’. Esto, antes de verla, darse ella misma un saque y al otro día pontificar sobre su sabiduria pret-a-porter. Ni hablar del consensuado sexo con drogas que es demonizado (sobretodo si es homosexual) porque la radicalidad del deseo ha sido reemplazada por la asepsia de la inclusión respetable. Para mí, tanto Viola como Reynal, pueden meterse la domesticación del deseo (la primera del deseo queer y la segunda del deseo de reventarse, heredado de la famosa dealer matrona familiar) en el orto.
Los 12 pasos funcionan como dispositivos pastoral por excelencia.No solo gestionan la conducta de los participantes, sino que producen subjetividades dóciles a través de la autovigilancia, la moralidad, y la confesión.
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La relación entre el poder pastoral foucaultiano y los programas de 12 pasos es sumamente fértil, ya que estos últimos funcionan como dispositivos pastorales por excelencia: no solo gestionan la conducta de los participantes, sino que también producen subjetividades dóciles a través de la autovigilancia, la confesión y la incorporación de un marco moral que regula la vida íntima. En este sentido, los programas de 12 pasos no solo operan como formas de tratamiento de las adicciones, sino que también funcionan como dispositivos de gobierno pastoral que normativizan el deseo, la culpa y la redención individual. Por esto, Narcoticos Anónimos solo puede ser un lugar de ayuda para el que quiere dejar la droga pero no puede convertirse, como fue mi grave error en Inglaterra, en un ambito social. Hay varias razones para esto que voy a explorando en diferentes posts, pero ahora voy a referirme a ‘la logica de la confesion’. Algo muy familiar en la Argentina, tan adicta al psiconalisis (del que ya hablaré tambien).
La confesión es uno de los mecanismos centrales del poder pastoral, heredado de la tradición cristiana. En la Argentina, no hay amistad sin confesion. No hay relacion entre hijos y padres sin confesion. En la confesión, el sujeto debe revelar su interioridad, exponiendo sus pecados, faltas o deseos, bajo la promesa de redención. Este acto de autoexposición genera un ciclo de control: al confesar, el sujeto se somete voluntariamente a la autoridad del confesor (sacerdote, terapeuta o grupo), que lo guía, lo corrige y, en última instancia, lo pone en su lugar. Esto hizo que este blog fuera y será tan verdaderamente disidente. Pero, no pienso cometer los errores de la primera vez en la que crei que aquellos que recibian mi critica eran mas inteligentes y no estaban tan metidos en su propia miseria de manera tan pero tan inconsciente. Ser inteligente es poder entender el contexto en el que uno se encuentra.
En Alcoholicos Anónimos y Narcoticos Anónimos, la logica pastoral es muy clara. Desde el paso 4 (“Hicimos un minucioso y valiente inventario moral de nosotros mismos”) hasta el paso 5 (“Admitimos ante Dios, ante nosotros mismos y ante otro ser humano la naturaleza exacta de nuestros defectos”), la dinámica confesional es explícita. La “admisión” no solo tiene un propósito terapéutico, sino que también lo somete a uno somete al sujeto a una forma de supervisión mutua, donde la redención pasa por la transparencia total y esto, en sociedades como la Argentina o la Inglesa es un tema muy delicado. Esta dinámica pastoral produce un sujeto continuamente expuesto, cuya “salvación” depende de la repetida confesión pública de sus faltas. El problema es que esa ‘purga’ personal se transustancia automaticamente en autoridad y tenes que escuchar a esta manga de pelotudos dar lecciones de vida cuando lo unico que saben es tomar el atajo para todo. No creo equivocarme con la siguiente generalizacion: los 12 pasos arruinan eticamente al que los lleva adelante. Es casi como el artista que tiene éxito muy temprano en su carrera, como Siquier, y queda en un loop de estupidez en donde el dinero puede fluir, las cosas que la sociedad valora pueden serle dadas pero nunca saldra del circulo narcisista de su propia idiotez.
Los 12 pasos producen un sujeto expuesto, cuya “salvación” depende de la repetida confesión pública de sus faltas. El problema es que esa ‘purga’ personal se transubstancia en autoridad del fracasado sobre el momentáneamente frágil.
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Continuará





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